Más que el Muro de las Gandolas debería llamarse el de las Lamentaciones, ya que la roca podrida de la desafiante cara norte nos hizo abandonar dos líneas ya comenzadas y desistir de otra sin siquiera aventurarnos. Eso sí, la sur nos guardaba el regalo que salvó el día, permitiendonos diseñar un recorrido más o menos asequible y seguro por todo el centro de la tapia.
           Descripción: El croquis habla por si solo, R1.bis equipada para rapelar. Roca costra mediocre en algunos pasajes ¡cuidado!

